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(28) ¡Cómo podéis renegar de Allah cuando estabais muertos y os dio la vida! Después os hará morir y de nuevo os dará la vida. Luego, a Él habréis de volver.
Sura 2 – al Baqarah

كَيْفَ تَكْفُرُونَ بِاللَّهِ وَكُنتُمْ أَمْوَاتًا فَأَحْيَاكُمْ ثُمَّ يُمِيتُكُمْ ثُمَّ يُحْيِيكُمْ ثُمَّ إِلَيْهِ تُرْجَعُونَ

Esta es una de esas aleyas que cuando la leemos sentimos una cierta inquietud, pues nunca estamos seguros de haberla entendido correctamente. Todos los comentarios y traducciones que se hacen de esta aleya resultan en una misma idea: Estábamos muertos antes de venir a la existencia, antes de llegar a dunia. Sin embargo, la vaguedad de esta interpretación reside en el hecho de que para estar muertos antes tuvimos que estar vivos.

La forma amwatan أَمْوَاتًا utilizada en esta aleya, es un plural de mait مَيْت, que deriva del verbo mawata مَوَتَ, y significa muertos (adjetivo). Al ir precedida del verbo kana كان en segunda persona del plural kuntum كُنتُمْ, la expresión kuntum amwatan كُنتُمْ أَمْوَاتًا toma un sentido de pasado. Más aún, esta forma verbal indica un estado y no una acción –en algún momento debió ocurrir la acción de morir, ya que el estado al que se hace referencia es el de muertos. Por lo tanto, tuvo que haber un tiempo anterior en el que estuviéramos vivos. Para obviar este inconveniente interpretativo se recurre a la idea de que aquí “muertos” significa no existentes, nada, no erais nada. Sin embargo, cuando en el Qur-an se nos recuerda que, en efecto, hubo un tiempo pre-existente en el que no éramos nada, no se utiliza el verbo mawata مَوَتَ en ninguna de sus formas, sino la expresión lam iakun shaiyan لَمْ يَكُن شَيْئًاno era nada; o lam takun shaiyan لَمْ تَكُ شَيْئًاno eras nada:

(1) ¿Acaso no hubo un tiempo en el que el hombre –insan– no era nada digno de mención? (2) Creamos al hombre –insan– de un cigoto a partir de la mezcla de dos fluidos para probarle, y le dimos la percepción y la comprensión.
Sura 76 – al Inan

هَلْ أَتَى عَلَى الإِنسَانِ حِينٌ مِّنَ الدَّهْرِ لَمْ يَكُن شَيْئًا مَّذْكُورًا

 (9) Dijo: “Así ha dicho tu Señor: ‘Eso es fácil y liviano para Mí. ¿Acaso no te creé antes cuando no eras nada?’”
Sura 19 – Mariam

قَالَ كَذَلِكَ قَالَ رَبُّكَ هُوَ عَلَيَّ هَيِّنٌ وَقَدْ خَلَقْتُكَ مِن قَبْلُ وَلَمْ تَكُ شَيْئًا

En la sura 76 se habla de un tiempo en el que el insan existía, pero no era nada digno de ser mencionado, no había entrado todavía en la historia y, por lo tanto, no hay mención de él. Es el tiempo del bashar. Tras su actualización –el insan– comienza la historia y ahora es lo único realmente digno de ser mencionado. En estas dos aleyas se especifican las dos fases de la creación de la especie humana –bashar y su actualización el insan (ver artículo XVII, apéndice G, apartados IV, V, VI y VII y referencias F3 y F4). En ambas suras se utiliza la expresión lam takun shaiyan لَمْ تَكُ شَيْئًاno eras (era) nada. No se dice que estuvieras muerto, pues se mantenía en estado de potencia en la entidad bashar.

En la sura 19 se utiliza la misma expresión que en la sura 76 –nada, no eras nada وَلَمْ تَكُ شَيْئًا. En ambos casos se hace referencia a la situación del insan antes de manifestarse en la vida de dunia –nada, insan en potencia, y nada en absoluto, antes de que Allah el Altísimo lo diseñara. En ninguna de estas dos suras, empero, se utiliza el verbo morir mawata موت, ya que antes de venir a la existencia no eras nada, no existías.

Sin embargo, a continuación, en esta misma aleya (28:2) se utiliza el verbo hay-ya حَيَّ (originalmente hayawa حَيَوَ) en su forma IV ahya-kum أَحْيَاكُمْ (transitivo) para denotar no un estado, sino una acción, la acción de vivificar, de dar vida. Esta diferencia en las formas verbales matiza el significado de la frase –nadie nos ha hecho morir, hemos ido muriendo a lo largo del tiempo hasta llegar al estado de muertos; a continuación, viene la acción –alguien o algo tendrá que vivificarnos, que darnos la vida. Por lo tanto, la secuencia sería de un estado – a una acción.

Parece, pues, evidente que la expresión kuntum amwat كُنتُمْ أَمْوَاتًا significa –estabais muertos y, por lo tanto, antes estabais vivos. Siempre que se utiliza en el Qur-an el término mait مَّيْتًا –muerto, se hace referencia a todo aquello que puede estar vivo, como en la siguiente aleya:

(48) Es Él Quien envía los vientos como anuncio de Su rahmah. Hacemos que caiga del cielo un agua purificadora (49) para vivificar con ella a una tierra muerta مَّيْتًا.
Sura 25 – al Furqan

La tierra está muerta, pero antes estaba viva y lo volverá a estar una vez que caiga el agua de lluvia. No utilizaríamos el mismo término –mait مَّيْتًا muerto– para hablar de una roca, ya que se trata de un elemento inerte que nunca ha estado vivo y, por ello, nunca podrá morir ni encontrarse en el estado de muerto. El mismo uso que encontramos en la siguiente aleya:

(56) Luego, después de haber estado muertos مَوْتِكُمْ, os devolvimos a la vida para que de nuevo sintierais agradecimiento.
Sura 2 – al Baqarah

Este escenario no puede referirse al insan antes de manifestarse en dunia, pues no tenemos ninguna referencia coránica que lo indique o insinúe.

Por otra parte, la estructura “Cómo podéis renegar de Allah cuando…” da a entender que se va a hablar de algo conocido, de algo que sabemos o de algo de lo que tenemos experiencia directa. Funciona a modo de prueba, de argumento. Es como si dijéramos “¿Cómo puedes hablar de mí así cuando te ayudé en aquella difícil situación”? Obviamente sabemos cuál fue esa situación y cuál fue la ayuda que recibimos, ya que la segunda parte de la frase es la prueba, el argumento, de que “no deberías hablar de mí así”. Sin embargo, en el caso de la aleya que nos ocupa, no sabemos que hubiéramos estado vivos y luego muertos y de nuevo devueltos a la vida. No recordamos haber pasado por esas fases antes de venir a dunia ni tenemos ninguna evidencia de que hayan tenido lugar.

La interpretación de que ese “Estabais muertos y os dio la vida” significa que se está hablando de un tiempo anterior a nuestra manifestación en dunia resulta incompatible con el número de muertes y resurrecciones que habría sufrido el insan según el texto coránico. Si tomamos esa muerte y esa resurrección como un acontecimiento anterior a la vida del insan en dunia, el anuncio de la segunda muerte y la segunda resurrección mencionado en la aleya –Después os hará morir y de nuevo os dará la vida– sólo puede referirse a la muerte del insan en dunia y a su resurrección en Ajirah. En ese caso, faltaría la muerte y la resurrección que se mencionan en esta aleya:

(68) Se soplará en el cuerno صُورِ y caerán fulminados فصَعِقَ  todos cuantos haya en los Cielos y en la Tierra, salvo quien así haya decidido Su voluntad. Luego, se soplará en él صُورِ una vez más y se levantarán expectantes.
Sura 39 – az Zumar

En la siguiente aleya se mencionan las dos muertes y los dos resurgimientos de la mayoría de los insan:

(11) Dirán: “Señor nuestro, nos has hecho morir dos veces y dos veces nos has dado la vida. Reconocemos nuestras faltas. ¿Hay alguna forma de salir de este camino de perdición?”
Sura 40 – Ghafir

Mas no de todos, ya que tanto los verdaderos creyentes como los harbiyun sólo experimentarán una muerte y una vuelta a la vida. A los primeros los habrá protegido Allah de todo mal y de toda angustia en un dominio especial para ellos (ver artículo XXI y cuadro C7). En cuanto a los segundos, estarán esperando su destino final en una especie de yahim.

Para ninguno de estos dos grupos habrá juicio, pues su suerte final ha sido decidida según su actuación en dunia –para los creyentes verdaderos, el Jardín; y para los harbiyun, yahannam.

De forma secuencial el escenario que se establecerá desde la Hora hasta la ejecución de la sentencia final podría desarrollarse de la siguiente manera:

S1- EL GRITO الصَّاخَّةُ ESTABLECE LA HORA – CAMBIO DE CONFIGURACIÓN DE CIELOS Y TIERRA – LOS INSAN MUEREN

S2- SE SOPLA EN EL CUERNO صور – SE DA COMIENZO AL DIA DEL RSURGIMIENTO – A TODO ÉL – A TODAS SUS FASES

S3- CAE UNA LLUVIA QUE REGENERÁ LAS SEMILLAS (ver apartado II) – SE REGENERAN LOS INSAN – ASÍ FUE EL COMIENZO

S4- EL GRITO صَيْحَة – SALEN LOS INSAN QUE HAY EN LA TIERRA

S5- EL GRITOزَجْرَةٌ  Y EL CLARIN نَاقُورِ DIRIGEN A LOS INSAN Y LOS AGRUPAN

S6- SE SOPLA EN EL CUERNO صور Y TODOS CUANTOS HAY EN LOS CIELOS Y EN LA TIERRA CAEN FULMINADOS صَعِق

S7- SE CAMBIAN LOS CIELOS Y LA TIERRA POR OTROS يَوْمَ تُبَدَّلُ الأَرْضُ غَيْرَ الأَرْضِ وَالسَّمَاوَاتُ

S8- SE SOPLA DE NUEVO EN EL CUERNO صور Y SE LEVANTAN EXPECTANTES – COMIENZA EL JUICIO

S9- COMIENZA EL ÚLTIMO TRAMO DE ESTA CREACION: LA VIDA DESPUÉS DEL JUICIO FINAL – DESTINO FINAL

Es cierto que la secuencia S6 no hace referencia a una muerte como la que se ha producido en la secuencia S1. En ésta ha sido el resultado natural de estar vivos en dunia –en un momento u otro tendremos que morir y seremos enterrados, yaceremos bajo tierra. En la S6, en cambio, se nos hace morir, se nos desconecta, por un tiempo. No ha sido una muerte natural. Ha sido el estruendoso ruido del cuerno el que nos ha hecho caer muertos. Son, pues, dos tiempos y dos estados diferentes los que separan S1 de S6.

El verbo árabe que se emplea en la S6 es sa’aqa صَعَقَ en su forma sa’iqa صَعِق, la misma que se utiliza en esta aleya, y puede convertir en pasiva a la primera forma. Significa –desmayarse a causa de un sonido estruendoso, y también puede significar –morir, caer muerto. La idea se completa con el significado de sa’iqah صاعِقَة, sustantivo del mismo verbo, y que significa –rayo y también el sonido estruendoso que causa el rayo o la muerte o lo que causa la muerte. Vemos, pues, que el verbo sa’iqa significa morir o desvanecerse a causa de un sonido como el que produce el rayo, y en su connotación pasiva se podría traducir –ser muerto, hacer que caiga muerto por el sonido del rayo.

Ese es el escenario que nos relata la aleya 68 de la sura 39 –el ruido del cuerno producirá, de forma inmediata, la muerte súbita, instantánea, (delante del verbo va la partícula fa ف que indica sucesión ininterrumpida) de cuantos haya en los Cielos y en la Tierra. Después se soplará de nuevo y todos volverán a la vida –se levantarán. No son muertos que yazcan dentro de la tierra, en tumbas. Esa fase, la del resurgimiento, se ha terminado. Es como si a un robot le cortásemos el flujo de electricidad –quedaría inerte o incluso caería al suelo.

Por lo tanto, podemos concluir que hay dos muertes (S1 y S6) y dos volver a la vida (S4 y S8), a partir de la manifestación del insan en dunia.

Todo ello nos lleva a buscar una interpretación más coherente de la aleya objeto de este artículo y que de nuevo reproducimos a continuación:

(28) ¡Cómo podéis renegar de Allah cuando estando muertos os habrá dado la vida! Después os hará morir y de nuevo os dará la vida. Luego, a Él habréis de volver.
Sura 2 – al Baqarah

كَيْفَ تَكْفُرُونَ بِاللَّهِ وَكُنتُمْ أَمْوَاتًا فَأَحْيَاكُمْ ثُمَّ يُمِيتُكُمْ ثُمَّ يُحْيِيكُمْ ثُمَّ إِلَيْهِ تُرْجَعُونَ

Para ello, deberemos tener en cuenta el análisis lingüístico e interpretativo que hemos realizado en los párrafos anteriores –la primera muerte y la primera vuelta a la vida mencionadas en la aleya hacen referencia a la muerte del insan en dunia y su posterior “resurrección” en el Día del Resurgimiento; mientras que la segunda muerte y la segunda vuelta hacen referencia a la secuencia S6 y S8.

No obstante, aún queda un inconveniente por resolver: ¿Por qué se utiliza el pasado كُنتُمْ أَمْوَاتًا estabais muertos para referirse a una acción futura estaréis muertos? Esta estructura narrativa forma parte del estilo coránico, si bien en todas las lenguas hay siempre alguna forma verbal de pasado que hace referencia al futuro para indicar que la acción se realizará con toda seguridad, como cuando alguien nos pide que hagamos algo y nosotros le respondemos: “hecho”, “dalo por hecho”, “considéralo hecho” (en inglés, done, consider it done, en francés fait, considère que c’est fait). En este caso utilizamos un participio pasado para indicar que esa acción se llevará a cabo sin que nada pueda impedirlo, a pesar de que se trate de una acción futura. Por otra parte, el uso del presente para expresar futuro es muy común en la mayoría de las lenguas, e indica que estamos seguros que la acción se realizará: “La semana que viene llega Ahmad.” El uso del presente de indicativo en este ejemplo da mayor certitud de que se realizará la acción de “llegar” que en el caso de utilizar un futuro simple: “La semana que viene llegará Ahmad”; aquí la certitud disminuye y simplemente damos cuenta de una posible acción.” Vemos, pues, que el uso de los tiempos verbales depende de la actitud del hablante y de su posición con respecto al tiempo absoluto. Otro ejemplo a este respecto lo encontramos en uno de los usos del futuro perfecto –cuando se refiere a un pasado probable, como en la frase: “Juan no está en su despacho.” –“Habrá salido.”

No obstante, en ninguna lengua se permite utilizar un pasado simple para referirse al futuro –tampoco en árabe– ya que todo el mundo sabe que el futuro es impredecible. Sin embargo, en el Qur-an se utiliza esta estructura porque cuando se nos informa de una acción futura no cabe la posibilidad, por remota que sea, de que no ocurra. Para expresar esta absoluta certitud, el Qur-an utiliza el pasado para referirse al futuro.

El narrador del texto coránico a veces nos habla desde el presente y nos hace protagonistas de una acción ocurrida en el pasado –Recordad cuando dijisteis: ¡Musa! No creeremos en ti hasta que no veamos a Allah manifestarse abiertamente.”(2:55). Obviamente ni nosotros ni la gente del Quraish del tiempo del Profeta (s.a.s) le dijimos nada a Musa. Es como si la historia fuese para el narrador un solo acontecimiento en un solo escenario, y todo ocurriese al mismo tiempo. A veces nos habla desde el futuro, desde Ajirah, y entonces se expresa en pasado –pasado para él, pero futuro para nosotros –Cuando la Tierra sea (presente de subjuntivo con idea de futuro) arrasada دُكَّتِ hasta quedar plana y venga جَاءَ tu Señor y vengan (presente de subjuntivo con idea de futuro) los malaikah en filas y filas (89:21-22). Sin embargo, en árabe, la misma idea se expresa con pasado simple (pretérito indefinido o imperfecto de indicativoالماضي ):

كَلاَّ إِذَا دُكَّتِ الأَرْضُ دَكًّا دَكًّا وَجَاءَ رَبُّكَ وَالْمَلَكُ صَفًّا صَفًّا

Para nosotros esas acciones ocurrirán en el futuro, pero para el portavoz del Consejo Supremo, ya han ocurrido desde su “presente”.

Por lo tanto, esta estructura narrativa expresa dos ideas: 1) Hay absoluta certitud objetiva de que las acciones de las que se está hablando ocurrirán. 2) El hablante narra los acontecimientos futuros desde un futuro más lejano y, por lo tanto, para él ya son pasado.

Tenemos en el Qur-an muchos ejemplos de esta estructura:

(101) Cuando se sople نُفِخَ (pasado en árabe, presente en español) en el cuerno, de nada servirán ese Día parentescos ni linajes, ni tendrán nada que preguntarse يَتَسَاءَلُونَ (presente en árabe para indicar que esta acción ocurrirá después de la anterior que viene en pasado).
Sura 23 – al Muminun

فَإِذَا نُفِخَ فِي الصُّورِ فَلا أَنسَابَ بَيْنَهُمْ يَوْمَئِذٍ وَلا يَتَسَاءَلُونَ

(68) Se soplará en el cuerno y caerán fulminados todos cuantos haya en los Cielos y en la Tierra, salvo quien así haya decidido Su voluntad. Luego, se soplará en él una vez más y se levantarán expectantes.
Sura 39 – az Zumar

وَنُفِخَ فِي الصُّورِ فَصَعِقَ مَن فِي السَّمَاوَاتِ وَمَن فِي الأَرْضِ إِلاَّ مَن شَاءَ اللَّهُ

ثُمَّ نُفِخَ فِيهِ أُخْرَى فَإِذَا هُم قِيَامٌ يَنظُرُونَ

(69) Brillará la Tierra con la Luz de su Señor. Se colocará el Kitab. Se hará venir a los Profetas y a los que sean testigos. Se juzgará entre ellos con la verdad, y no sufrirán injusticia alguna.
Sura 39 – az Zumar

وَأَشْرَقَتِ الأَرْضُ بِنُورِ رَبِّهَا وَوُضِعَ الْكِتَابُ وَجِيءَ بِالنَّبِيِّينَ وَالشُّهَدَاءِ

وَقُضِيَ بَيْنَهُم بِالْحَقِّ وَهُمْ لا يُظْلَمُونَ

En todas estas aleyas se combinan en árabe pasados (en naranja) y presentes (en verde) para relatar noticias del futuro, de Ajirahse soplará, caerá fulminado, querrá Allah, brillará, se colocará, se juzgaráno se preguntan entre ellos, miran, no son tratados injustamente. El uso del pasado indica la posición del narrador con respecto a los acontecimientos que relata (para él son pasado), mientras que el uso del presente hace referencia a unos sucesos que acontecerán en un tiempo posterior –ocurrió eso y ocurri eso otro.

Esta es la posición del portavoz en la aleya 28 de la sura 2 –nos habla desde Ajirah, después del Resurgimiento; desde esa posición la muerte en dunia y la posterior resurrección que acontecerán a los insan son narradas en pasado كُنتُمْ أَمْوَاتًا فَأَحْيَاكُمْ; en cuanto a la segunda muerte y al segundo levantamiento –S6 y S8– se narran en presente para indicar que serán un acontecimiento futuro posterior con respecto a las secuencias S1 y S4.

El narrador nos recuerda algo que ya sabemos, si bien hay muchos insan que lo han olvidado –moriremos y seremos sacados de las tumbas, de la tierra, completamente formados tras la secuencia S3S4. Después quedaremos fulminados, muertos y se cambiará esta Tierra y los Cielos por otros nuevos, tras lo cual volveremos a la vida para ser juzgados (ver cuadro C7).

Por otra parte, el insan no escapará a las transformaciones que sufrirá el universo:

(60) En Nuestro plan está el que la muerte sea para vosotros un destino común, y no podréis evitar (61) que os transformemos, y os originemos en una forma y un estado que no conocéis. (62) Siempre habéis tenido conocimiento de cómo fuisteis producidos la primera vez –¿es que ya lo habéis olvidado y por ello os desentendéis?
Sura 56 – al Waqiah

Los sueños y el efecto de ciertas drogas son la prueba de que las nafs pueden modificar radicalmente su estructura lógica y perceptiva. La idea de que el insan es una entidad acabada, terminada, fija y completa es errónea. Para cada fase de la existencia y para cada estado se necesita un cuerpo, un soporte, un sustrato específico y adecuado y, al mismo tiempo, la activación de elementos genéticos que cambien nuestras capacidades cognoscitivas y nuestras percepciones, de modo que siempre estemos afinados con las diferentes configuraciones de la creación.