Un médico del ejército estadounidense dijo que le retiraron del tratamiento de pacientes agudos después de informar que tres pilotos habían sufrido lesiones graves por la vacunación Covid.
Redacción de World Tribune
La teniente coronel Theresa Long dijo el martes a un grupo organizado por el senador republicano de Wisconsin, Ron Johnson, que «en una mañana tuve que dejar en tierra a 3 pilotos debido a lesiones por vacunas. El tercer piloto había sido vacunado y se sentía como si estuviera borracho, fatigado crónicamente, a las 24 horas de haberse vacunado”, dijo Long. «El piloto me dijo que no sabía qué hacer, así que bebió mucho café para ‘despertarse’ y seguir volando hasta que se dio cuenta de que aquella medida no le aliviaba.»
Long continuó: “Al día siguiente de informar a mi comando que en una mañana tuve que dejar en tierra a tres pilotos debido a lesiones por vacunas, se cancelaron mis pacientes, se sacaron mis gráficos para su revisión y me dijeron que me retiraban de la tarea de ver pacientes agudos, solo pilotos sanos para su examen físico de vuelo.»
«Con respecto a la seguridad de la aviación, la comunicación de riesgos es fundamental», dijo. «Vi a cinco pacientes en la clínica, dos de los cuales presentaban dolor en el pecho días o semanas después de la vacunación y posteriormente se les diagnosticó pericarditis y se hizo todo lo necesario para descartar que fuera miocarditis.»
Long, cirujano de la Escuela de Vuelo del Ejército de los EE UU en Fort Rucker, presentó una declaración jurada a principios de este año advirtiendo de que el mandato de la vacuna Covid del Pentágono podría hacer que todo el cuerpo de pilotos del Ejército estuviera médicamente conectado.
En la declaración jurada, Long dijo que ella personalmente observó:
• «La soldado en mejores condiciones físicas que he visto en más de 20 años en el ejército, pasó de un entrenamiento de atleta para la escuela de guardabosques, a estar físicamente debilitada con problemas cardíacos, tumor cerebral pituitario recién diagnosticado y disfunción tiroidea a las pocas semanas de haberse vacunado.»
• «Un aumento significativo en el número de soldados jóvenes con migraña, cáncer, miocarditis… después de la vacunación … enfermos, postrados en cama, debilitados e incapaces de trabajar durante días o semanas después de la vacunación… tres miembros de la tripulación de vuelo presentaron ambos problemas de salud sistémicos importantes y agresivos.»
• «Una muerte y dos casos de UCI en Fort Hood; el fallecido era un piloto del Ejército que podría haber estado volando en ese momento. Los tres eventos de embolia pulmonar ocurrieron a las 48 horas posteriores a la vacunación.»
• Más de quince médicos militares condenados al ostracismo por informar sobre problemas de seguridad en relación con las vacunas COVID.»
Long agregó: «No puedo atribuir estos resultado a otra causa que a las vacunas Covid-19. Cada uno de ellos estaba en óptimas condiciones físicas antes de la inoculación y cada uno sufrió el evento a los 2 días posteriores a la vacunación.»
El denunciante expone varios problemas con el ensayo de la vacuna Covid-19 de Pfizer
Kit Klarenberg para RT
La revista médica BMJ ha publicado un informe incendiario que expone datos falsos, errores en ensayos ciegos, vacunadores mal entrenados y un seguimiento lento de las reacciones adversas en el ensayo de fase tres del Covid de Pfizer.
En el centro de la exposición se encuentra Brook Jackson, quien, durante dos semanas, desempeñó el cargo de director regional de Ventavia Research Group, la compañía contratada para ayudar con la prueba fundamental. Jackson proporcionó a BMJ docenas de documentos internos de la compañía, fotos, grabaciones de audio y correos electrónicos que respaldan sus inquietudes.
Jackson revela que el personal de Ventavia que realizó controles de calidad estaba abrumado por el volumen de problemas que estaban identificando. Informó repetidamente a sus superiores sobre la mala gestión del laboratorio y los problemas de seguridad del paciente e integridad de los datos.
Jackson informó sobre sus preocupaciones a la Administración de Drogas y Alimentos de los EE UU (FDA), pero fue despedida ese mismo día en concepto de que «no encajaba bien.»
A medida que los precios mundiales de los alimentos se salgan de control, la compra de alimentos por pánico se volverá cada vez más común
Michael Snyder para ActivistPost
El gobierno comunista de China le está diciendo a la gente que se preparen para una inminente escasez de alimentos. Los precios de algunas verduras aumentaron en más del 50 por ciento durante el mes de octubre, y el lunes se ordenó a los ciudadanos chinos que almacenaran alimentos para los próximos meses…
El Ministerio de Comercio del país emitió el lunes por la noche un aviso en el que ordenaba a los gobiernos locales que alentaran a las personas a almacenar «artículos de primera necesidad», incluidos vegetales, aceites y aves de corral, para «satisfacer las necesidades de la vida diaria y las emergencias».
La agencia también instó a las autoridades locales a asegurarse de que las personas tengan un «suministro adecuado» de elementos esenciales este invierno hasta la próxima primavera. Y les dijo a esas autoridades que mantuvieran los precios estables, una fuente de ansiedad en las últimas semanas, ya que el costo de las verduras se ha disparado en toda China debido a las lluvias inusualmente fuertes que han dañado los cultivos.
Una vez que se emitió esta directiva en China, provocó una ola masiva de compras pánico en los supermercados locales …
La directiva se publicó en la cuenta de Weibo del gobierno, una plataforma similar a Twitter, y declaró: «El Ministerio de Comercio alienta a los hogares a almacenar los productos de primera necesidad». Tenía más de 17 millones de visitas hasta el martes. A algunos cibernautas les preocupaba que una inminente invasión de Taiwán fuera el motivo de la directiva de almacenamiento.
¿Podría ser que los funcionarios chinos quieran que la gente se prepare porque pronto se producirá una invasión de Taiwán?
Sí, eso es posible, pero es de esperar que todavía no estemos en ese punto.
Definitivamente creo que se acerca el conflicto militar, pero esperemos que pueda posponerse el mayor tiempo posible.
Aquí en los Estados Unidos, ciertamente no estamos listos para un enfrentamiento con China por Taiwán, porque hemos comenzado el proceso de expulsar a un gran número de personas del ejército.
La Fuerza Aérea ha dado de baja a 40 miembros del servicio y ahora se está preparando para abordar a los miles de personas que no pudieron vacunarse contra el coronavirus antes de la fecha límite del 1 de noviembre que impusieron los funcionarios, convirtiéndose en la primera rama en ejecutar lo que los líderes militares consideran una medida de protección esencial, que los críticos creen que socavará la capacidad de Estados Unidos para defenderse.
SONDAS: Ninguna reacción sustancial se produce ante estas declaraciones y análisis. La estrategia, ya lo hemos dicho, es la de no contestar, la de actuar como si nunca se hubieran publicado estas noticias. Y ello porque el problema no es médico ni sanitario, sino socio-político. Hay una agenda, un plan, un proyecto, un orden mundial, que debe implementarse según las fases que llevamos viendo desde principios de 2020 –virus, pandemia, mascarillas, confinamiento, inmovilidad, descenso drástico del turismo y de los viajes internacionales en general, problemas de suministros, pasaportes de salud obligatorios, campos de cuarentena…
Y todo ello sin que haya la menor causa que justifique estas medidas entre absurdas y devastadoras.
Y, sin embargo, funcionan –la gente, mayoritariamente, se vacuna, lleva puestas las mascarillas, guarda las distancias, se prepara para posibles apagones de electricidad, hace acopio de alimentos por si fallan, definitivamente, las cadenas de suministros…
Lo más misterioso, no obstante, es el ataque continuo a las fuerzas armadas estadounidenses por parte del Pentágono –entre los que mueren, enferman y son despedidos, pronto el ejército norteamericano se convertirá en un batallón de jubilados sin destreza ni capacidad de combate. Y ello en un momento en el que, aparentemente, Rusia, China, Irán y Corea del Norte, quizás se pueda añadir a esta lista de presuntos enemigos Turquía e India, se están preparando para guerras locales que podrían salpicar al mismísimo territorio estadounidense. ¿Se trata de la misma desidia que ha mostrado el ejército norteamericano en Afganistán? ¿La misma incompetencia? ¿La misma puesta en escena? ¿La misma fabricación?
En la primera fase del Reinicio va haber destrucción, caos, revueltas callejeras, un aumento intolerable de delitos, sabiamente orquestado por los fontaneros del deep state –cortes constantes de electricidad, escasez de alimentos, pérdida de empleos, inflación galopante…
La gente saldrá a la calle y será entonces cuando los gobiernos declaren el estado de emergencia y sea el ejército quien se haga cargo de restaurar el orden –años de terror y despoblación. Después se hará la luz y se instaurará el nuevo orden mundial –si no hemos podido desarrollar la tecnología capaz de fabricar androides, desarrollaremos la psico-tecnología de convertir a los humanos en robots, en entidades desprovistas de consciencia, listas para aceptar un solo gobierno, un solo ejército, una sola sociedad.
Las aguas volverán así a su cauce –las elites por un lado y por otro los esclavos ahora felices de serlo, siempre conectados a mundos virtuales: METAVERSE
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